Desde los años 80, el coaching ha ido abriéndose camino y consolidándose como un importante movimiento en todo el mundo, secundado por una potente demanda social. En la actualidad, la psicología está jugando un papel clave para el desarrollo de un Coaching profesional de alta calidad, a través de la consolidación de una nueva subdisciplina denominada Psicología Coaching.
A grandes rasgos el Coaching se encarga de mejorar el bienestar y el rendimiento laboral y personal de los individuos que no presenten problemas clínicamente significativos de salud mental o malestar psicológico.
Por otro lado, a pesar de que el Coaching, por definición, trabaja con poblaciones no clínicas, los estudios han puesto en evidencia que ente el 25% y el 50% de las personas que solicitan servicios de Coaching presentan niveles de psicopatología clínica.
Parece, por tanto, que la formación en la identificación de los aspectos clínicos y de salud mental que ofrece la ciencia psicológica, constituyen elementos necesarios para garantizar unos servicios éticos y de calidad en Coaching.
Es por todos estos motivos que la psicología Coaching se sitúa como una prometedora y sólida línea de expansión dentro de este amplio marco de trabajo.
Texto extraído de: www.cop.es/infocop/pdf/2041.pdf